Cambia un muro de piedra
por un puente de oro,
escucha la cuchara
de tu hermano
lamiendo el plato
y verás que ningún
tamaño es fijo…
Cambia un muro de piedra
por un puente de oro,
escucha la cuchara
de tu hermano
lamiendo el plato
y verás que ningún
tamaño es fijo…